Laponia es uno de los destinos más increíbles del planeta y en nuestro viaje participaremos en una gran cantidad de actividades al aire libre, como safaris en motos de nieve, trineos de reno, de huskies, raquetas de nieve, pesca en hielo… sin duda serán unos momentos inolvidables para toda nuestra vida. Para poder disfrutar de esta experiencia al máximo y que el frío no sea un inconveniente, nuestros programas incluyen un traje térmico especial que vestiremos durante nuestra estancia, en la que encontraremos temperaturas que pueden llegar a los 25ºC bajo cero (dependiendo de la fecha para viajar a Laponia). En todo caso, el frío no será un problema si se siguen unas instrucciones básicas; así, la sensación de encontrarse con unas temperaturas extremas se convertirá en un elemento más a recordar del viaje a Laponia.
Laponia, situada en latitudes polares del hemisferio norte, es una región fría. En la costa las temperaturas son más suaves y las precipitaciones más abundantes pero en las zonas continentales, donde se encuentran la mayoría de destinos turísticos del norte de Finlandia, el ambiente es más seco y las temperaturas más extremas. Aunque las temperaturas oscilan en función de distintas variables siempre es conveniente estar preparado para combatir las bajas temperaturas mientras pasamos horas al aire libre. Dicho esto, cabe destacar que, bien abrigados y siguiendo los consejos básicos que a continuación os proporcionamos, las bajas temperaturas se soportan bien y el viaje a Laponia se convierte en una experiencia inolvidable aunque las temperaturas puedan oscilar entre los -5ºC y -25ºC.
En primer lugar, es fundamental alimentarse e hidratarse bien a primera hora de la mañana y continuar ingiriendo pequeñas cantidades de alimento, al tiempo que hidratándose, mientras se mantiene uno lejos de una fuente de calor. Es importante recordar que la ropa que utilizamos no nos proporciona calor sino que trata de retener el que nuestro cuerpo irradia. Es por ello por lo que debemos mantenernos activos en la medida de lo posible; ya sea dando un corto paseo, agitando nuestros brazos, subiendo las rodillas al pecho o jugando con la nieve. De esta manera, con el esfuerzo, generaremos calor.
La ropa de abrigo es otro factor de capital importancia, pero no el único, a la hora de enfrentarnos a las bajas temperaturas. Para tomar las decisiones correctas debemos tener en cuenta que las prendas tienen que poseer propiedades térmicas y facilitar la transpiración corporal. Elegiremos prendas de acuerdo al material de fabricación y al tejido de las mismas para adaptarlas al uso invernal. Nunca utilizaremos prendas de algodón (tejanos, pana, lona, etc.).
Recuerda que en tu viaje a Laponia te proveeremos de una equipación térmica que podrá usar durante toda tu estancia. Este equipo consiste en un mono térmico, para ponerse encima de nuestra ropa y unas botas térmicas. Además, para las actividades que se realizan en trineos o motos se proveerá a los participantes de unas manoplas, un casco y un pasamontañas.
El uso de varias capas de ropa es un método muy efectivo para proteger el cuerpo contra el frío, el viento y la humedad. Aconsejamos vestirse con las siguientes capas de la siguiente forma:
1ª capa
La primera capa son las prendas interiores, los tejidos que entran en contacto directo con nuestro cuerpo y que primero nos vestimos. Estas prendas deben ser ligeras, con propiedades térmicas y muy transpirables. Deben vestirse ajustadas al cuerpo pero sin apretar o molestar. El material más recomendable es la lana (merino wool). El conjunto completo estaría formado por unos guantes finos, unos calcetines finos, unas mallas finas, una camiseta fina y un protector de garganta fino.
2ª capa
La segunda capa debe estar formada por prendas con buenas propiedades térmicas y fácilmente transpirables. El material más conveniente es la lana aunque también se puede optar por el fleece (Polartec). El conjunto completo estaría formado por unos guantes o manoplas, unos calcetines gruesos, unas mallas o pantalones, un jersey o forro polar y un gorro.
3ª capa
La tercera capa es a menudo la más externa, la que se encuentra en contacto con los agentes atmosféricos y por ello es muy importante que esté formada por prendas cortaviento e impermeables. Este tipo de ropa está fabricada con materiales sintéticos y debe estar rellena de tejidos con propiedades térmicas y de fácil secado –no es el caso de la pluma; ni natural (pluma), ni artificial (Primaloft, Coreloft, Thermatek, etc.). En nuestro caso podemos utilizar el mono térmico integral como tercera capa y, durante los días más fríos, convertirlo en una cuarta capa después de utilizar alguna prenda más bajo éste. Además completaremos el atuendo correcto con unas manoplas o guantes impermeables y la capucha de nuestro traje térmico.
Es fundamental recordar de nuevo que la mayor parte del calor corporal se pierde por los pies y por la cabeza y que, a menudo, son las extremidades inferiores y superiores las que más sufren los rigores térmicos. Por ello no podemos descuidar nunca la protección de estas partes del cuerpo: utilizaremos gorro siempre que estemos al aire libre, utilizaremos manoplas en vez de guantes siempre que sea posible y llevaremos botas apropiadas para andar sobre la nieve que eviten deslizamientos y caídas y protejan nuestros pies del frío y la humedad.
Hay que tener en cuenta, una vez más, que aspiramos a mantener nuestro propio calor corporal y para ello necesitamos mantener una circulación sanguínea fluida, por lo que nunca tendremos los pies y las manos demasiado comprimidos por la ropa y calzado que vestimos. De la misma manera el traje térmico ha de quedarnos ligeramente holgado para facilitar nuestros movimientos y posibilitar la existencia de una capa de aire caliente, entre éste y las capas de tejido anteriores, que actúa de aislante térmico.
En cuanto al frío y la duración de la batería de equipos fotográficos y móviles, protegiendo el aparato cuando no está siendo usado en un bolsillo de una zona cercana al corazón podremos alargar las horas de batería disponibles y no perder la posibilidad de hacer esas fotos que no debes perderte durante los recorridos de los safaris.
Seguramente, en las cabañas, restaurantes y lugares cerrados pasaremos algo de calor y si sigues estas instrucciones que hemos facilitado, durante las actividades estarás perfectamente protegido y disfrutarás de un viaje a Laponia maravilloso, por lo tanto el frío no deberá ser un problema en este mágico viaje. En la completa documentación de Laponia viajes de Catai que recibiréis unos días antes del viajar a Laponia encontraréis información ampliada al respecto.
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